Capitulo 5

Amigos

Esta mañana todo fue diferente, aparte que tenía que ir a la escuela tuvieron que despertarme obligada por vez primera en mi vida y todo por ese sueño que me despertó en medio de la noche. La tía Alice se me acerco me toco la mejilla y yo abri un ojo para observar su hermoso y pequeño rostro.

—Cariño, ya es hora de despertar llegaras tarde a la escuela. —dijo con tono alegre.

—Cinco minutos mas— dije con voz perezosa.

—Que te ocurre, esta no eres tu— me sonrió, luego se levanto de mi cama y salió sin casi hacer ruido.

Me pare a regañadientes y me estire para desperezarme, fui a mi baño y me mire al espejo. Tenía un aspecto diferente, tenia marcada unas sombras levemente moradas debajo de mis ojos, debido al poco sueño que tuve. 

Decidí tomar una ducha a ver si terminaba despertándome. El agua estaba demasiado fría pero tal vez se debía a mi temperatura normal.

Salí de la ducha ya un poco mas despierta y fui a escoger lo que me pondría hoy tome una camiseta cualquiera al recordar que tendría que usar el impermeable para aparentar que tenía frio si no me llamarían loca, y unos pantalones de mezclillas.

Baje las escaleras y fui directo a la cocina y note que mi amigo Jacob estaba ahí. Me senté a su lado para desayunar.

— ¿Qué haces aquí? — le dije con una sonrisa, ya que me gustaba tenerlo por aquí.

—Buenos días, también es un placer verte de nuevo— dijo con tono sarcástico. Le di un golpecito en el hombro y el ser rio de mi.

—Eso fue una caricia para mí— dijo burlándose de mi, mientras yo ponía los ojos en blanco. —por lo menos tienes más fuerza que tu mama cuando era humana.

Siguió riendo, y mire a mama para ver a que se refería. —Si quieres golpearlo te busco un bate— dijo mama sonriendo. Luego se acercó para darme un beso en la sien. No quise preguntar a que refería ya que imagine que sería un chiste privado.

La abuela Esme me sirvió mis huevos fritos con tocino, y me los comí con ganas. Mientras desayunábamos (Jacob y yo solamente) note que faltaban miembros de mi familia.

— ¿Donde están papa, el tío Emmett y el tío Jasper?— no había notado que no estaban aquí, esta mañana estaba distraída.

—Se fueron de casa— me dijo la tia Rosalie— se fueron ayer luego de que te fueras a dormir.

Por eso papa no me había dicho nada sobre el sueño de anoche, me quede pensativa. Ese sueño fue tan extraño.

— ¿quién me llevara a la escuela?, todavía no me dejan manejar— dije con esperanza de que me dejaran llevarme ese mercedes.

—si quieres, te llevo yo a la escuela— se ofreció Jacob.

—está bien, terminamos de comer y nos vamos. — comí con calma ya que Jacob manejaba rápido.

Terminamos de desayunar y fui a buscar mi bolso y mi impermeable, baje las escaleras y Jacob me siguió a la puerta para irnos. Me despedí de todos con un gesto de la mano y salimos de la casa.

— ¿nos vamos en moto o en auto?

—Bella me prestó el volvo de Edward.

—Ni a mí me lo prestan— dije frustrada e hice un mohín.

—tú no tienes edad para conducir ¿recuerdas pequeña?

—ya no me digas pequeña.

Nos subimos al volvo y Jacob tomo el Camino para adentrarse a Forks. Estaba pensativa, ese sueño me daba mala espina.

— ¿qué piensas? —dijo con extrema preocupación

—En porque mama dice que me dará un bate para golpearte— le mentí, no quería que nadie supiera mi sueño, primero quería hablar con papa.

—es que cuando era humana, yo eh, le hice algo que no le agrado. Ella me golpeo la cara y de no ser porque ella empezó a gritar de dolor no hubiese notado que me “golpeo” —hizo un gesto de comillas para remarcar la palabra. — ella se rompió la mano, y yo le sugerí que para la próxima buscara un bate o una palanca de hierro si quería hacerme daño.

Eso por alguna razón lo hizo reír, tal vez le trajo recuerdos en los que obviamente yo no estaba, eso me dio una punzada mínima de celos. Avece mama y Jacob eran mejores amigos de los que éramos Jacob y yo, y hablaban de cosas que ni entendía. Cambie de tema, ya que no quería sentir celos de mama porque no era lógico.

— ¿Qué haremos después de la escuela?— pregunte emocionada.

—Creo que tendremos que ir directo a tu casa, tu mama está un poco nerviosa con lo de la visión de Alice, tendremos que esperar a que todo se calme para que nos dejen divertirnos.

Eso me decepciono, de verdad quería una tarde como la de ayer. Llegamos a la escuela y me despedí de Jacob con un abrazo. Me baje del auto y me encamine al aula de biología. Me fui a mi puesto donde Christian me recibió con una sonrisa.

—Hola Renesmee— dijo eufórico.

—Dime Nessie— dije devolviendo la sonrisa— ¿Cómo estas Christian?

—Pues, bien. ¿Cómo estuvo tu tarde?

—Excelente, me divertí con unos amigos que tenía tiempo sin ver.

—me alegro.

—muchachos, hoy veremos videos respectivos a la clase de hoy. —dijo el señor Banner.

La clase fue aburrida y se hizo demasiado larga al igual que las primeras antes del almuerzo. Cuando llegue a la cafetería me alegre de ver que los chicos que conocí ayer (Nathaly y Christian) me llamaban para desayunar con ellos. Compre un jugo que no se qué sabor era y me fui directamente a su mesa.

—Hola Renesmee—dijo Nathaly, por lo poco que sabía de ella no era de esas chicas gritonas que siempre estaban hablando.

— ¡Hola Nath!

—Te gusta la escuela, parece que te adaptas muy bien.

—Sí, me gusta Forks.

—Hagamos algo esta tarde chicas, para olvidarnos un poco  de nuestros deberes. —dijo Christian mas 

emocionado de lo debido.

—Está bien— dijo Nathaly sin chistar

—Debo preguntar a mamá primero, hay unos problemas en la casa.

—Pues llámala— dijo Christian

—Eh, no tengo teléfono— dije apenada, como no se me había ocurrido comprar uno

—Ten el mío— dijo Nathaly— llámala ya para que nos vayamos juntos de la escuela.

Marque el número de casa, espere a que repicara un par de veces y contesto la abuela Esme.

—Sí, diga— eh abuela soy yo Nessie, llamo para preguntar si puedo salir con unos amigos de la escuela.

—debes preguntarle a tu madre cariño, ya te la paso.

—Nessie, que sucede mi niña.

—nada mama, era solo para saber si podía salir con unos amigos después de la escuela.

—está bien pero cuando estés lista me llamas para buscarte a donde estés o te vas a casa de tu abuelo Charlie.

—está bien mama gracias, adiós

—adiós cariño.

Y colgué la llamada, sonreí pensando en que me divertiría hoy. Sería algo totalmente diferente a lo que me ha hecho divertir toda mi vida. En ese momento me empezó a gustar más la escuela

—me dieron permiso, y ¿A dónde vamos?

—Las llevare a un lugar que me encanta desde que llegue a Forks, les encantara.

Esa idea me encanto y de repente me encontré cada vez más emocionada y con ganas de que terminaran las clases para ir a ese misterioso lugar que prometía ser interesante.

Nathaly Loosle

Christian Connel